La industria textil colombiana se adhiere tímidamente a la sostenibilidad

Por:

Tamara Gonzalez Litman

Publicado el
29 ene. 2019

Colombia se suma a la ola verde con la mira en la sostenibilidad para la industria textil. Múltiples empresas locales se adhieren al reciclaje de aguas, la generación y utilización de la energía limpia y el reciclaje textil. Aunque las inversiones son altas y los resultados lentos, el consumidor final no cuenta aún con la conciencia necesaria para un cambio real. 

“Estamos comprando ropa cada vez con más frecuencia, de menor calidad y a menor precio. El cliente busca opciones de buena relación entre precio y diseño, sin pensar más allá. Con un mayor consumo, mayor demanda de producción y mayor rotación de prendas generamos un ciclo vicioso en el que un tercio de la ropa termina en incineradores o vertederos a menos de un año de ser producida”, confió a FashionNetwork.com Mariana Matija, experta en sostenibilidad. 

Matija, quien participó en la reciente edición de la feria Colombiatex, opinó además que uno de los grandes flagelos de esta revolución sostenible radica en la desinformación y la confusión. Para ella, afirmar que "la industria textil es la segunda más contaminante del planeta” no tiene base científica.

En cambio, Matija reconoce que un hecho probado que pone en el ojo del huracán al sector es que el 8 % de los gases de efecto invernadero provienen de la industria textil y del calzado, al tiempo que entre un 20 % y un 25 % de los compuestos químicos que se producen en el mundo se utilizan para acabados textiles. 

El término sostenibilidad, como se conoce hoy en día se utilizó por primer vez en los años 70, cuando un comité ambiental de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) lo definió como “el desarrollo que cubre las necesidades de las generaciones presentes, sin poner en riesgo la capacidad de las futuras generaciones de cubrir esas mismas necesidades”. En esa ocasión se agregó que la sostenibilidad se alcanza con el balance entre el ámbito social, económico y ambiental.


Colombia se da sus primeros pasos hacia la sostenibilidad

En Colombia, la industria textil ha comenzado a dar sus primeros pasos hacia la sostenibilidad con la producción ecoamigable, la tecnología de reciclaje de aguas y la generación de energía verde, entre otras medidas. 

Uno de los grandes casos de transformación industria textil es Fabricato, que después de múltiples cambios, cataloga su producción como sostenible. “Tenemos autogeneración de energía. Una parte está generada a base de carbón, con tecnología y filtros especiales antipolución que anulan la emisión de gases, mientras que la otra parte es energía verde, generada por nuestra hidroeléctrica que es suficiente para abastecer el 100 % de la producción de la semana” informó Carlos Alberto de Jesús, presidente de Fabricato a este medio. 

Además el directivo confirmó que la empresa textil recicla actualmente el 65 % del total de las aguas que utiliza en su producción de hilos y manufactura. Asimismo, Fabricato reutiliza el 100 % de las aguas teñidas por medio de un sistema cerrado de aguas tratadas en su empresa, generando cero impacto hídrico. 

Por su parte, el Gobierno colombiano ha lanzado dos iniciativas con el fin de fomentar el cambio de procesos y utilización de recursos en la industria textil.

“Estamos desarrollando un programa en cooperación con Reino Unido, para que las empresas puedan mejorar sus procesos con eficiencia energética”, informó Camilo Fernandez de Soto, director del Programa de Transformación Productiva (PTP) del Ministerio de Industria y Comercio.

“En el caso piloto que realizamos con la texilera Coltejer, logramos un ahorro del entre el 3 % y 5 % en la energía”, concluyó el ejecutivo. 


El costo de la ola verde

Uno de los grandes obstáculos de la transición hacia la sostenibilidad en la industria textil colombiana, según los empresarios y expertos en la materia, radica en la demanda de inversión en tecnología. Ellos argumentan que “las inversiones en temas sociales y ambientales son muy altas y no siempre son reconocidas”. 

“Hemos visto que el consumidor sí quiere prendas de bajo impacto ambiental, pero el precio sigue siendo un factor muy importante en la compra de las prendas de vestir en Colombia”, indican las fuentes que remarcan que un alza en los costos obligaría a las empresas a destinar fondos de sus rubros de reinversión y utilidades para los cambios. 

Desde Colombiatex, Inexmoda quiso reforzar esta tendencia con “la ruta de la sostenibilidad”, un proyecto por medio del cual un comité especializado asignó una distinción oficial verde a un grupo de 19 empresas locales y extranjeras como Enka, Hilaturas Ferre, Kaltex, Textiles Lafayette y Jeanología, por nombrar algunas. De esta forma se les dio importancia entre los asistentes y compradores a las industrias que apuestan por la conservación del medio ambiente y la producción verde.