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Francia hacia una recesión y libera fondos por 45 000 millones de euros
Después de las restricciones de viaje anunciadas el lunes por la noche por el presidente de Francia, Emmanuel Macron, la mañana del martes el ministro de Economía y Finanzas, Bruno Le Maire, detalló las medidas de apoyo para las empresas y los empleados mencionadas por el presidente. Las medidas anunciadas por Le Maire cuentan con el apoyo de una subvención por 45 000 millones de euros.
"Es una primera ayuda económica inmediata, pero todos deben comprender que hay una guerra contra el virus, también hay una guerra económica y financiera, será duradera, será violenta. Y las empresas que se ven afectadas hoy, los artesanos, los comerciantes lo saben mejor que nadie, lo sufren. Están preocupados. Y esta guerra debe movilizar a todas nuestras fuerzas, nuestras fuerzas nacionales, nuestras fuerzas europeas y nuestras fuerzas del G7. Vamos a poner 45 000 millones de euros para empresas y empleados. Garantizaremos a nivel estatal los préstamos bancarios para que, cuando una empresa vaya a su sucursal en Angers, en Nantes o en Sélestat, pueda encontrar el préstamo que necesita: 300 000 millones de euros de garantía estatal para préstamos bancarios, lo que significa que no deberíamos tener una sola pyme que no encuentre el efectivo que necesita. Decidimos ayer poner un billón de euros sobre la mesa a nivel de los Estados miembro de la UE como garantía para los préstamos bancarios para garantizar que haya efectivo y liquidez para las empresas europeas".
Más allá de estos elementos, el ministro también mencionó la creación de un fondo de solidaridad para empresas con una facturación anual de menos de un millón de euros que sufran una disminución drástica en su actividad.
"Queremos que la solidaridad nacional juegue al máximo"
"Es un mínimo de 1000 millones de euros", anunció el ministro.
“Esta situación es una tragedia para millones de franceses. Por lo tanto, queremos que la solidaridad nacional juegue al máximo. Será para los microempresarios, para las empresas más pequeñas, para los trabajadores autónomos que tienen una facturación inferior a un millón de euros, será para todos aquellos que hayan perdido, entre marzo de 2019 y marzo de 2020, el 70% de su facturación. Lo haremos de forma simple, masiva y solidaria. La tarifa básica que se garantizará a cualquier empresa que ingrese a estos campos es de 1500 euros. Sea porque su negocio ha cerrado o porque ha habido una caída en la facturación. Y hay casos en los que necesitaremos más porque el negocio estaba en peligro de quiebra, el restaurador puede cerrar, el teatro puede cerrar. Haremos más y caso por caso veremos qué se puede agregar", explicó.
El ministro aclaró que la acción de este fondo, que por lo tanto también se dirige a los 1,3 millones de microempresarios identificados en Francia el año pasado, se suma a la postergación de todos los impuestos y cargas sociales durante el mes de marzo, medida que representa una gran parte de la dotación de 45 000 millones de euros. En este punto, Bruno Le Maire incluso especificó que la medida podría llegar hasta "posiblemente la cancelación de estos cargos para todos aquellos que estarían amenazados de quiebra. Como dijo el presidente de la República, no queremos quiebras. Habrá cancelaciones caso por caso", insistió.
El Gobierno tiene la intención de limitar el impacto en la economía porque espera una recesión para el conjunto del año. El ministro de Economía señala que la crisis sanitaria es un desastre económico en Francia pero también en todo el mundo.
"Tendremos en 2020 una situación de crecimiento muy deteriorada. Debo presentar en unas horas un proyecto de ley correctivo con el ministro de Cuentas Públicas, Gérald Darmanin, en el consejo de ministros que registraremos en anticipación del crecimiento de -1 en 2020, es decir crecimiento negativo. Y prefiero ser muy transparente con los franceses. Este -1 es una cifra provisional. La zona euro también entrará en recesión. Vamos a luchar con lucidez, el combate será violento", manifestó.
Más allá de la intensa lucha contra el virus, según el ministro, el desafío para el Estado es establecer medidas para permitir que la economía y las empresas francesas se preparen para las secuelas. "Todas estas medidas se toman con una idea muy simple. La economía debe poder reiniciarse con fuerza cuando la epidemia esté, espero, detrás de nosotros lo antes posible", enfatizó.
“El paro parcial que ha sido simplificado por Muriel Pénicaud y para el que se ha establecido un umbral más allá de un salario mínimo. Esto se hace para que no perdamos habilidades. Lo que es, más preciado en un negocio, lo más necesario, son las habilidades de los empleados, su savoir-faire, su experiencia. Hemos aprendido las lecciones de la crisis de 2008 cuando hubo despidos masivos porque las empresas no podían hacer otra cosa. Les decimos, mantengan a sus empleados poniéndolos en actividad parcial", indicó.
Nacionalización y plan de recuperación
La nacionalización está sobre la mesa. Bruno Le Maire indica que está dispuesto a hacer cualquier cosa para proteger a las grandes compañías debilitadas en los mercados financieros. "Puede pasar por la recapitalización. Puede pasar por inversiones de capital. Incluso puedo usar el término nacionalización si es necesario. Usaremos todos los medios a nuestra disposición", dijo el ministro durante una conferencia de prensa telefónica organizada el martes 17 de marzo por la mañana por el ministerio.
La gran incógnita para los profesionales hasta ahora se ha referido a la naturaleza del Plan de Solidaridad, cuyo programa ahora se ha presentado. El nuevo misterio es el famoso "Plan de Recuperación", que se supone que revivirá la economía al final de la crisis actual. Un punto que aún no es hora de abordar, según dijo el ministerio. "Las consultas están en marcha, pero aún es demasiado pronto para discutir los lineamientos de este plan y su implementación", dijo Bruno Le Maire.
El ministro también explicó la decisión de mantener la actividad industrial del país. "Sí, hemos tomado la decisión de mantener la actividad económica, incluso una reducida", dijo el ministro. "Queremos garantizar a los franceses que su suministro de bienes, servicios y tratamiento de residuos continuará, en particular. Esto es obviamente un año complicado en una cadena de valor debilitada. Pero eso es lo que garantiza la continuidad de la nación", concluyó.
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